La primera decisión que tuvo el actual equipo de gobierno fue paralizar la ejecución del carril bici, algo que no es un hecho aislado en Baza, sino que responde a un posicionamiento político contrario ante las nuevas formas de movilidad sostenible, adaptadas a los nuevos tiempos y que buscan una ser más respetuoso con el medio ambiente. Actitudes que se ha reproducido en otros lugares como Elche, Gijón, Valladolid o Palma, donde curiosamente gobierna el Partido Popular con Vox.
El equipo de gobierno socialista, apostó claramente por implantar en la ciudad una red de carriles bici que se iniciaron en la Carretera de Murcia y José Salinas y que pretendían establecer una red que uniera las principales vías y ejes, permitiendo el acceso a lugares tan importantes como el entorno de los mayores centros educativos, además de instalando cerca de 80 aparcabicicletas y aparcapatienes repartidos por centros educativos y espacios públicos. Con ese principio solicitamos la subvención en 2021 para desarrollar una zona de bajas emisiones, dotada con un presupuesto de 800.000 €. por parte del Gobierno Central (90% ministerio y 10% ayuntamiento), conseguida en su día y que se encontraba en fase de ejecución por parte de la empresa adjudicataria.

Para ello se preparó una memoria descriptiva de las actuaciones a implementar, siguiendo los criterios y directrices que marcaban las bases reguladoras de dicha convocatoria. En mayo de 2022 tuvimos la resolución definitiva y se inició el proceso de encargar el proyecto de ejecución y la posterior licitación, cumpliendo rigurosamente con los plazos establecidos en las bases.
En esa fase se puso de manifiesto por el equipo redactor, la insuficiencia económica de la subvención, debido a una mayor profundización técnica y a la situación de encarecimiento de los precios y materiales que se evidenciaba en ese momento. En este punto se optó por la solución que mantuviese la naturaleza de reducir un 30% las emisiones de CO2 (objeto principal del proyecto), adecuando los itinerarios de los carriles bici, consiguiendo tener un proyecto que se ajustara económicamente al presupuesto subvencionado y que mantuviese la totalidad de kilómetros solicitados, incluso los aumentaba ligeramente gracias a los cambios en su adecuación.
Desde que se tuvo la constancia de que se debía de haber comunicado la modificación y al MITMA (Ministerio de Transportes Movilidad y Agenda Urbana) nos pusimos en contacto con los técnicos del ministerio, trasladándose nuestra firme voluntad de realizar todas aquellas alegaciones para justificar que la modificación del proyecto, que tenía encaje en los supuestos a los que hace referencia el artículo 21 de las bases reguladoras de la convocatoria 2021.
De esas conversaciones se nos traslada las siguientes consideraciones:
- La modificación del proyecto realizada por el anterior equipo del ayuntamiento, no implica que haya que devolver los fondos del Plan de Recuperación. De hecho se iba a presentar una solicitud de modificación debidamente justificada del proyecto, porque el programa de ayudas a municipios para la implantación de ZBE y transformación de la movilidad urbana prevé que puedan darse modificaciones de los proyectos financiados respecto a los inicialmente solicitados, siempre que exista una circunstancia sobrevenida que justifique la modificación, que los cambios no supongan un cambio sustancial (menos del 50%) en la actuación subvencionada y que no se dañan derechos de terceros, cuestiones que se manifiestan en el proyecto de Baza.
- Como es natural, la memoria descriptiva que se presenta en 2021, era una propuesta inicial, válida para acceder a la convocatoria, y que una vez concedida requería de una mayor concreción técnica que se recogiera en el proyecto de ejecución. Este proyecto analizaba con una mayor profundización las mejores soluciones técnicas de cada itinerario, manteniendo los kilómetros planteados en la solicitud y garantizando la consecución del 30% de reducción de emisiones de CO2.
- Además, nos trasladan que muchos Ayuntamientos han solicitado modificaciones de proyectos y que la forma correcta de proceder, sería presentar una aclaración formal y con mayor concreción de las causas que motivaron las modificaciones. Con los antecedentes de otros ayuntamientos, se podría dar por bueno la actual modificación y continuar con la ejecución del proyecto. El ayuntamiento tiene hasta noviembre de 2024 para tener finalizadas todas las actuaciones. Plazo suficiente para ejecutar el proyecto en tiempo y forma.
En este punto queremos poner de manifiesto que el actual equipo de gobierno, aun teniendo conocimiento de que técnicamente se puede justificar la modificación del proyecto y enviar al ministerio la propuesta, durante estos meses no ha habido ningún avance ni se ha trabajado en el sentido de realizar las gestiones necesarias para garantizar el cumplimiento de la subvención en la situación actual.
Consideramos que el Sr. Ramos no puede escudarse en esta cuestión para no ejecutar la actuación de los carriles bici, ya que se encuentra en la fase de poder presentar las alegaciones técnicas que tienen encaje en lo referido en el artículo 21 y justificar adecuadamente la modificación del proyecto, sin tener que devolver el dinero y posibilitando que Baza tenga una red de carriles bicis adecuados con cerca de 6 kilómetros y mejoren la movilidad de la ciudad.
Si es cierto que el señor Alcalde cree en la movilidad sostenible, debería de realizar en primer lugar todas las gestiones necesarias y posibles para conseguir finalizar el proyecto actual y no tomar como primera y única opción, paralizar y devolver la subvención, aspecto que denota cuál es el interés y las ganas de trabajar por los proyectos.
Es posible que no solamente las dudas técnicas tengan que ver en la inacción en los avances del proyecto y se deba a otras más políticas como está ocurriendo en otras ciudades donde los gobiernos de PP y VOX están eliminando las actuaciones que tienen como finalidad mejorar la movilidad y hacer ciudades menos contaminantes.
Desde el grupo municipal socialista somos conscientes de la complejidad que tienen la gestión de las subvenciones, pero la experiencia en este ámbito nos capacita para afirmar que, si nosotros estuviéramos gobernando, nuestra última opción sería devolver el dinero y privar a Baza de los carriles bici, ya que haríamos todo lo que estuviera en nuestras manos para poder desarrollar el proyecto, ya que técnicamente es viable.