A PROPÓSITO DE LA CONVOCATORIA DE HUELGA DE LOS TRABAJADORES DE LA EMPRESA DEL SERVICIO DE LIMPIEZA

“No quiero ser mal pensado”, con esta frase nos sorprendía el Sr. Ramos en un medio de comunicación cuando después de relatar el problema que atraviesa la negociación de los trabajadores con la empresa del servicio de limpieza y de recogida de residuos en Baza, han tomado la decisión, por mayoría, de hacer una huelga indefinida a partir del 28 de febrero. En una intervención pública, con ese lenguaje sibilino al que nos viene acostumbrando, se sorprende de la decisión de los trabajadores y deja caer la perla de que no es casualidad que esto esté ocurriendo con el nuevo gobierno del PP y que no ocurría cuando gobernaba el PSOE.

Con esto demuestra dos cosas: primero, la mala intención de sus palabras y, segundo, el total desconocimiento de lo que pasaba en el Ayuntamiento antes de que el PP gobernara, Baste recordar lo que le dijo su compañera de partido antes de las elecciones: que no había dado golpe en los cuatro años que había estado como concejal.

Para conocimiento de todos/as, en 2022 hubo, igual que ahora, una amenaza de huelga si no se cumplían las demandas salariales de los trabajadores. En las distintas reuniones, el papel de los miembros del equipo de gobierno que participaron en ellas fue el de mediadores y algo debimos hacer bien, cuando se llegó a un acuerdo que complació a las dos partes, evitándose la posibilidad de una huelga.

No perdimos ni un momento sospechando que detrás del conflicto estaba la oposición, ni gimiendo por la situación que se presentaba, porque lo que tocaba era “remangarse y trabajar”, dos conceptos que por lo visto desconoce el Sr. Ramos. Por lo tanto cogemos la frase que dijo hace unos días: “que opine la ciudadanía”, pero que opine de la imagen que están dando Vds, de ver cómo gobiernan utilizando sólo el retrovisor, sin enterarse aún de que la responsabilidad de gestionar es suya, y de que pretender vivir de echarle las culpas al PSOE para ocultar su incapacidad “tiene las patas muy cortas”.

El grupo municipal socialista quiere que haya acuerdo entre los trabajadores y la empresa, que mejoren sus condiciones laborales y que haya paz laboral y social. Esto se conseguirá con el diálogo de las partes. El equipo de gobierno del Ayuntamiento tiene la obligación de hacer todo lo posible para que esto suceda, así que no invente fantasmas donde no los hay y, mucho menos, no los utilice para esconderse detrás de ellos.